Tiempo de elaboración | 55 minutos
Dificultad | Media
500g de coliflor fresca
200g de pan rallado
media cebolla
1 cucharita de ajo en polvo
2 huevos
3 cucharadas de perejil fresco
3 o 4 cucharadas de queso rallado
sal y pimienta negra molida.
Preparación
Limpiamos la coliflor, cortamos el tallo, separamos las flores y ponemos a hervir 5 minutos en una olla de agua y sal. Al cabo de este tiempo le retiramos del agua y dejamos escurrir unos minutos.
Picamos finamente la cebolla, el perejil y la coliflor.
Colocamos estos ingredientes en un bol, añadimos el queso rallado y el ajo en polvo, añadimos también los dos huevos. Sazonamos con sal y pimienta al gusto y mezclamos bien con la ayuda de una espátula. Añadimos ahora el pan rallado y volvemos a revolver bien todo.
Engrasamos una bandeja de horno con aceite de oliva. Con la mano vamos formando pequeñas bolas con la pasta que hemos hecho. Las bolas deben tener aproximadamente el tamaño de una pelota de pingpong, es decir unos 4 a 5 cm de diámetro. A medida que las formamos las colocamos sobre la bandeja.
Al horno 180ºC, unos 30 a 35 minutos. Hasta que estén doradas
